Los salvadoreños somos cachimbones ¡Ni el coronavirus nos quita la solidaridad! Mírate estas acciones tan chivas

Hace alrededor de una semana el rostro atestado de lágrimas de la señora Victoria Ramírez le dio vuelta al país como símbolo del desespero que sentían muchos salvadoreños urgidos por obtener el subsidio de $300, luego de pasar varios días sin poder salir a la calle a ganarse su pan de cada día debido a la pandemia del Coronavirus. Apenas unas horas después, pasó a ser símbolo, pero de la empatía y la solidaridad salvadoreña.
Muchos compatriotas conmovidos por su historia se volcaron a las redes sociales para buscar la manera de ayudarle. La popular cuenta de Twitter @LaMaraDice logró obtener su información y varios seguidores le lograron brindar ayuda.
#NiñaVictoria UPDATE:
— #LaMaraDice (@LaMaraDice) March 31, 2020
¡YA LA ENCONTRAMOS!
Ya hablamos con la hija de la niña Victoria, nos comentó cómo está y la situación en la que se encuentra.
Nos dijo que varias personas ya la han contactado para ofrecerle ayuda.😍
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Este afán del salvadoreño de brindar una mano amiga donde se necesita se ha podido observar en diferentes escenarios y con los más diversos personajes. Otro caso notable ha sido el de Dino Safie, quien convirtió a sus redes sociales en una bitácora de todo lo que le ocurre a una persona que es enviada a pasar la cuarentena a un centro de contención. Gracias la información que él compartió, muchas personas e incluso empresas privadas realizaron donaciones de comida y otros enseres a sus “compañeros de cuarentena”.
Bery Zamora, activista del rescate de animales en El Salvador, también se valió de sus seguidores en las redes sociales para conseguir ayuda. Varios donativos se lograron destinados a los que guardaban la cuarentena en el Hospital Saldaña gracias a ella. Además, sus tweets sobre todo lo que vive un paciente en un centro de contención o albergue durante la pandemia les ha permitido a muchos apreciar la labor de los médicos y enfermeras que los atienden arriesgando sus vidas en el proceso.
La Empresa Privada y algunos emprendedores también se han puesto al día con los afectados. El Café Don Pedro, por ejemplo, ha aceptado donativos para preparar platos de comida para los bomberos, cruz roja, enfermeras, médicos e indigentes del país en estos tiempos difíciles (para colaborar puede contactarlos en dalmau.cm@gmail.com).
#QuedateEnCasa Nuevamente el Café de Don Pedro trajo 185 almuerzos al Polideportivo de Merliot, el menú incluye platillos para pacientes diabéticos e hipertensos. Son diferentes empresas las que están contribuyendo en esta emergencia. pic.twitter.com/HxPphVxDkt
— Qué Pasa (@SvQuepasa) April 6, 2020
La Cervecería Cadejo y la heladería Vanilla Spoon también se han sumado a la entrega de kits de donaciones a los centros de contención y albergues e incluso hasta fungiendo como centros de acopio para recopilar donaciones de la ciudadanía y luego entregarlos.
La banca ha ayudado con donativos importantes, como el caso del Banco Cuscatlán que donó 30 mil pruebas al gobierno para detectar el COVID-19. El Banco Agrícola, por su parte, puso a disposición del público una línea telefónica para consultar si califican para el subsidio de $300, bastante útil para los que no tienen acceso a internet.
Y así, la lista continua. Ejemplos que deben servir de inspiración y cuyo mensaje de fondo es el mismo: solo juntos podremos salir de esta. Si está dentro de sus posibilidades brindar ayuda, hágalo. Nunca se sabe cuándo usted la va a necesitar.