Señalamientos contra Bukele por Mercado Cuscatlán reflejan su administración como presidente

La Cámara Sexta de Primera Instancia de la Corte de Cuentas de la República emitió ayer una resolución con una ristra de reparos en la administración del Mercado Cuscatlán entre enero de 2017 y 2018, tiempo en el que Nayib Bukele estaba al mando de la gestión como alcalde.
Los hallazgos de la Corte –bastantes, por cierto- de las irregularidades en las que incurrió el entonces alcalde, sirven de retrato y espejo de lo que ahora es como presidente.
Nepotismo, amiguismo
En su resolución, la Corte señala a Bukele –y asociados como Mario Durán- de Deficiencias Administrativas por irregularidades relacionadas al arrendamiento de algunos puestos del mercado Cuscatlán.
Por ejemplo, al dueño del puesto “Taberna Cuscatlán” le dieron 15 años de plazo de alquiler sin siquiera haber presentado un plan de inversiones (requisito). Lo mismo con un puesto dedicado a la venta de hamburguesas, propiedad de MICOMI S.A. de C.V.
Otros puestos, incluso, operaron sin pagar alquiler- al menos no oficialmente, porque nada es gratis en esta vida… política.
Irregularidades en contratos y Falta de Transparencia
Otra cosa que se volvió muy común en la administración de Bukele como presidente, ya la hacía como alcalde. Desde que se firmaron los contratos de construcción del mercado Cuscatlán, Bukele -versión alcalde- otorgó un contrato a una empresa guatemalteca incumpliendo la Ley de Adquisiciones y Contrataciones de la Administración Pública (LACAP).
La Corte de Cuentas determinó ahora que se hizo un pago excesivo de alquiler por el inmueble, y no por poquito sino por un exorbitante 43.02 % de más.
También se pagaron $650,000.00 para una obra que ni siquiera fue ejecutada y se realizaron obras sin permisos de construcción.